Saltar al contenido

Mi té de las cinco

Siéntate, relájate y disfruta de un momento donde tus cinco sentidos viajarán sin límite

  • Home
  • About me
  • Blog
    • Viajes
    • Lifestyle
    • Relatos
    • Step by Step
    • Gastro Pub
  • Hablamos
  • MoodBoard
    • City
    • Town
Mi té de las cinco

Autor: Lara Franco

Relatos

Relato: Los segundos de África

Publicada en octubre 21, 2019octubre 22, 2019

[…]

Step by Step

¿Cuestión de política o interés? El cuento de nunca acabar…

Publicada en octubre 1, 2019octubre 1, 2019

[…]

Relatos

Relato: Un mundo de oportunidades

Publicada en septiembre 17, 2019octubre 1, 2019

[…]

Lifestyle

El final del verano

Publicada en septiembre 3, 2019septiembre 17, 2019

[…]

Relatos

Relato. Yin Yang

Publicada en agosto 27, 2019agosto 27, 2019

[…]

Lifestyle

Sonríe, es gratis

Publicada en agosto 20, 2019agosto 27, 2019

[…]

Lifestyle

Dosifica y abre tus ojos

Publicada en agosto 6, 2019agosto 13, 2019

[…]

Uncategorized

Relato: Espigas de miel

Publicada en julio 30, 2019agosto 6, 2019

[…]

Lifestyle

Lo que siempre fuimos

Publicada en julio 23, 2019

[…]

Relatos

El camino que se quiere seguir

Publicada en julio 9, 2019julio 23, 2019

[…]

Navegación de entradas

1 2 … 9 Siguientes

¿Te ayudo?

Inspire your moments

Comparte si te ha gustado

¿Tienes un rato?

Lo que siempre fuimos

Publicado el julio 23, 2019 Lara FrancoDeja un comentarioPublicada en Lifestyle, Step by Step

Ocho y media de la mañana, el sol ya calienta en Madrid, la suave brisa acompaña mi despertar. La noche no ha sido tan calurosa como parecía. Cambiar el pueblo por la ciudad de vez en cuando no sienta nada mal. Aunque el asfalto queme y el ruido de las bocinas de los coches interrumpa el sueño.

Me lanzo a la calle sin pensar, esperando que la mañana me traiga fortuna y el destino quiera que no quiebre de una insolación. Son ya varios días los que llevo por España y todavía mi cuerpo no se ha acostumbrado a sobrevivir a estas temperaturas. De todos modos me quedo donde estoy ya que un pajarito me ha soplado que por Inglaterra el tiempo no da tregua y la lluvia inunda sus despertares.

Decido tomar el autobús. Siempre he sido más de superficie que de túneles y en esta ocasión voy con tiempo y un paseo por las calles de Madrid seguro me trae buenos recuerdos. Soy mucho de eso, de recordar, de revivir momentos donde fui feliz. Recorrer con la mente todas esas calles por las que un día me perdí y por las que seguramente vuelva a perderme dentro de muy poco.

Paso por un kiosco de camino a la parada, el olor a flores me llena. Las venden de toda clase y color. Porque Madrid es así, te sorprenden y te venden un periódico como un ramo de las flores más bonitas que puedas imaginar. Todo al alcance de tu mano.

Paso a paso me acerco a mi destino, los autobuses ya no hacen ruido, son ecológicos y el aire acondicionado de su interior sienta de maravilla. Parece que algo bueno sigue quedando vigente del gobierno de Carmena. Cuánto te va a echar de menos la capital, Manuela.

Fluyo por sus calles. Se nota que es julio. No hay agobios, todo discurre y mi mente vuela por todos esos momentos uniendo calles y situando mis vivencias y todos aquellos pasos con los que recorrí su fisonomía. Un año y medio después decenas de comercios han echado el cierre. Y donde había bares de toda la vida ahora me encuentro cadenas de repostería y gimnasios low cost. Dos o tres comercios tipo galerías sobreviven en el barrio como pueden ante la atenta mirada de las grandes marcas que están acabando con la esencia de todos esos barios donde cada vez que bajabas a comprar el pan o a tomar un café, te atendían con una sonrisa de reconocimiento. Sincera y amable. El hilo del progreso, el que todos alimentamos, pero que de vez en cuando, al echar la vista atrás, miras con nostalgia.

Veinte minutos de trayecto y ya he llegado a mi destino, al corazón del barrio Salamanca. Vuelvo a reconocer todas sus calles. Lo conozco bien, viví y trabajé entre sus emblemáticos y señoriales edificios. Hoy se muestra tranquilo, sin el típico bullicio que recorre sus tiendas y centros de negocios. Las vacaciones asolan la ciudad y yo me aprovecho de ello. Recados y gestiones terminadas, mi cuerpo me pide café. Tengo tiempo hasta coger el autobús de vuelta al pueblo y no desaprovecho la ocasión de pasarme por uno de mis rincones preferidos de la capital. El salón de té de Salvador Bachiller, en Goya, me pierde. Decorado al detalle, coqueto y tranquilo es el lugar perfecto para escribir estas líneas. Su música me transporta y su luz tenue hace que disfrutes de cualquier té o café que elijas. Tostadas de tomate para acompañar la mañana y recuperar fuerzas. Una delicia.

El reloj marca ya las doce y recapitulo todo lo que ha pasado por mi mente esta mañana. El poder del paso del tiempo. Lo importante que es y lo difícil que resulta muchas veces aguantar su tirón. El tirón de la crisis y la globalización que cerró y abrió todos esos comercios. Cómo todo cambia y evoluciona y cómo nosotros también maduramos con el paso del tiempo.

Me paro a pensar por un momento todo lo que he aprendido y cómo me ha sentado esta experiencia internacional en Inglaterra que acabo de vivir. Cómo he afrontado las relaciones sociales con la gente, el poder del trabajo y la barrera del idioma en algunas ocasiones. Y lo comparo con hace once años, la fecha cuándo abandoné también España para vivir un año en Italia. Y siendo sincera no tiene nada que ver. Ni la experiencia ni yo misma. En muchos puntos me reconozco, en aquella Lara de 21 años que se enamoró de Italia y exprimió sus nueve meses allí. Que vivió la cultura, se aprovechó de cada oportunidad y no tenía miedo a nada porque todo estaba por llegar. Pero en muchos otros he de reconocer que mi personalidad ha evolucionado y es otra. En cuanto a la conciencia social y lo difícil que resulta en muchos casos que la suerte te sonría. La Lara de ya casi 32 años sabe que nada llega si no lo buscas y que la mayoría de las veces las barreras que nos provocan miedos nos las ponemos nosotros mismos. Que no hay mejor aliado que el esfuerzo y la constancia y que con una sonrisa a tiempo se consiguen muchas cosas. La Lara de ahora valora cada detalle y sabe que no hay nada mejor que vivir rodeado de la gente que quieres. Y yo en eso soy muy afortunada.

Mis horas en Madrid van llegando a su fin por hoy. Me quedan dos recados más y el autobús de vuelta a Aranda. Qué bien me sienta la ciudad. Entiendo a los que detestan su agobio, contaminación y locura. Pero a mi me da vida. Me marcho tranquila; con ganas y a sabiendas que muy pronto Madrid y yo volveremos a ser cómplices. #FelizSemanaaTodos

  • tweet 
  • compartir 
  • compartir 

Londres: Sueños bajo miles de bombillas de colores

Publicado el noviembre 27, 2018marzo 12, 2019 Lara FrancoDeja un comentarioPublicada en Lifestyle

Uno de sus sueños estaba tan solo a una hora y media de tren. Eran las nueve de la mañana, no recordaba un cielo tan gris desde hacía mucho tiempo. Todo apuntaba a tormenta, pero ella ya iba metalizada. Ropa de abrigo, lluvia, paraguas… pasar un día en Londres se puede hacer muy largo si no vas bien preparado. (más…)

Calibrando tus sentidos

Publicado el julio 3, 2018julio 10, 2018 Lara Franco1 comentarioPublicada en Lifestyle

«De repente se dio cuenta que llevaba un buen rato sin pensar en nada. Hasta ese instante su cabeza había conseguido desconectar por completo. Una sensación que jamás había experimentado no por no intentarlo, sino porque nunca se había sentido fuerte para lograr dejar atrás los pensamientos y vaciar la mente.

¡Qué curioso! Se sentía cómplice del tiempo como si hubiera conseguido congelarlo y mover a su gusto las manecillas del reloj.  (más…)

ECHA UN VISTAZO

  • Relato: Los segundos de África octubre 21, 2019
  • ¿Cuestión de política o interés? El cuento de nunca acabar… octubre 1, 2019
  • Relato: Un mundo de oportunidades septiembre 17, 2019

Gracias por compartir

Tu opinión cuenta

  • Lara Franco en Retomando caminos, rompiendo fronteras
  • Marivi en Retomando caminos, rompiendo fronteras
  • Retomando caminos, rompiendo fronteras – Mi té de las cinco en 2019: Por un año sin excusas
  • Lara Franco en Machismo y sinrazón
  • Begoña ribate en Machismo y sinrazón
Creado con WordPress | Tema: Sydney por aThemes.